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miércoles, 29 de marzo de 2017

LA ENFERMEDAD DEL TABACO VERDE

La Enfermedad del Tabaco Verde (ETV) es un envenenamiento por nicotina que se produce al manipular la planta del tabaco. Los trabajadores corren un alto riesgo de desarrollar la enfermedad cuando su ropa se satura de tabaco que está humedecido por la lluvia, el rocío de la mañana o la transpiración. Los síntomas incluyen náuseas, vómito, mareo y dolor de cabeza, dolores abdominales y diarrea. En algunos casos, se produce postración severa, dificultad para respirar y fluctuaciones en la presión arterial y el ritmo cardíaco. Otra sintomatología frecuente es la relacionada con trastornos del sueño o dificultad para comer. Algunos de los síntomas de la ETV son similares a los del agotamiento por calor y el envenenamiento por pesticidas, lo que dificulta un diagnóstico correcto.


Pese a su efecto analgésico, la nicotina es muy venenosa e, ingerida en estado puro, es uno de los tóxicos más potentes. La toxicidad se manifiesta a partir de los 2-4 mg, siendo mortal a partir de dosis de 40-60 mg. Para tener una idea asequible del poder mortífero de la sustancia basta pensar que es tres veces más tóxica que el veneno de la serpiente de cascabel. Dadas las circunstancias, trabajar en el cultivo del tabaco es, contra lo que pudiera parecer a priori, un trabajo de alto riesgo, con alta probabilidad de desarrollar enfermedades profesionales inducidas.
El 97% de la producción de tabaco en España proviene de Extremadura, con una extensión cultivada cercana a las 9.000 hectáreas. España es el tercer productor de hoja de tabaco de la Unión Europea, con unas 37.500 toneladas (lo que supone un 17% del cultivo en Europa). La recolección de la hoja de tabaco suele hacerse con medios mecánicos, lo que minimiza los riesgos del contacto directo con el tóxico, algo que no ocurre en todas las plantaciones tabaqueras del mundo.
Los trabajadores se ven expuestos a la ETV y trastornos respiratorios causados por el polvo del tabaco y el humo de los hornos que se emplean para el secado y curado de la planta

Tabaco, tóxico de principio a fin

No es necesario abundar en los problemas de salud pública que representa el consumo de tabaco. Sin embargo, no podemos olvidar su impacto también sobre la cadena de producción. Un informe de Swedwatch, organización sueca (ONG) que estudia el impacto de las empresas sobre los derechos humanos y el medio ambiente en los países en desarrollo, advierte de los graves abusos que se cometen contra los derechos humanos en la industria del tabaco en Bangladesh. La situación se extiende a otras zonas deprimidas del globo que cultivan tabaco como medio de subsistencia. En esta industria precaria e insalubre suele participar toda la familia, lo que tiene un grave impacto sobre la salud infantil. Los trabajadores se ven expuestos a la ETV y trastornos respiratorios causados por el polvo del tabaco y el humo de los hornos que se emplean para el secado y curado de la planta. Los niños de las plantaciones presentan síntomas de debilidad, agotamiento y bajo peso corporal, hecho que provoca un alto índice de absentismo escolar. Por otra parte, cultivar tabaco conlleva una inversión elevada para los pequeños productores, que se ven abocados a una cadena de préstamos para cumplir con el compromiso suscrito con el comprador a través de contratos que, muchas veces, carecen de la mínima transparencia. La Unión Europea es el principal socio comercial de Bangladesh, lo que representa el 12% del comercio total de Bangladesh.

Enfermedad ignorada

Frecuente entre los recolectores y manipuladores del tabaco, la ETV se detectó por primera vez en los trabajadores de las plantaciones de tabaco en Florida, al inicio de los años 70. Los estudios confirmaron que la sintomatología observada en todos los ocupados en dicha actividad en cualquier parte del mundo estaba provocada por la absorción de la nicotina a través de la piel. Por tratarse de un tóxico soluble en agua, los científicos sugieren que la afección se da especialmente cuando la planta está mojada, momento en que su manipulación constituye un problema de seguridad laboral. Como promedio, los síntomas aparecen 10 horas después de la exposición, con una duración de entre 1 y 3 días cuando se efectúa el tratamiento adecuado. La manifestación severa de la intoxicación puede conducir a un cuadro clínico de convulsiones, disnea (sensación de ahogo por falta de aire) o el colapso vascular.
Las recomendaciones para los cosechadores son obvias: no cosechar tabaco después de una lluvia y/o manipular tabacos mojados, cubrir la mayor parte del cuerpo para minimizar el contacto del tabaco con la piel,  no trabajar descalzos, consumir abundante agua limpia y fresca, evitando en lo posible la ingesta de alimentos durante las tareas de la cosecha, no cosechar en horas de temperaturas extremas (entre las 12 y las 15 horas). Al finalizar la jornada laboral los operarios deben seguir una estricta higiene personal y cambio de ropa.
 Fuente http://www.proteccion-laboral.com


martes, 28 de marzo de 2017

Índice de Calidad de Empleo (ICE) ‘made in Spain’

La calidad del empleo es un concepto multidimensional, que necesita definición. Asempleo, la asociación empresarial de ETT, y la Universidad de Alcalá de Henares presentaron en 2016 su Índice de Calidad del Empleo, un modelo que se suma a otros existentes y, con ello, al debate de décadas sobre un concepto para el que no existe una lectura unívoca.
La modelización del concepto de calidad de empleo puede hacerse basándose en aspectos subjetivos: se centra en la idea de que la calidad del empleo es la utilidad que una persona obtiene de su empleo (depende de atributos del puesto como el salario, las horas trabajadas y el tipo de tareas), o aspectos objetivos: las características del puesto que satisfacen las necesidades de las personas en relación con el trabajo.

El ICE de Asempleo

Este índice, que se ha basado en los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) y la Muestra Continua de Vidas Laborales (MCVL) pone el foco en seis dimensiones que han considerado vitales para hablar de la calidad de un puesto: condiciones de trabajo, cualificación y formación, combinación de trabajo y vida continua, salarios, perspectivas profesionales y estabilidad en el empleo. Los desarrolladores del modelo han puesto el énfasis en que permita “la medición de los resultados para un periodo de tiempo largo, actualizarse con una periodicidad anual y compararse entre colectivos, en particular, según su tipo de contrato; a la vez que puede aplicarse a otros países de nuestro entorno para elaborar comparaciones posteriores”.
El marco referencial para nuestro país lo tenemos en la propuesta de la Comisión Europea sobre calidad de vida laboral, que hace referencia a un conjunto de diez dimensiones:
-Calidad intrínseca del puesto de trabajo.
-Cualificaciones, aprendizaje continuado y desarrollo profesional.
-Igualdad de género.
-Salud y seguridad en el trabajo.
-Flexibilidad y seguridad.
-Inclusión y acceso al mercado de trabajo.
-Organización del trabajo y equilibrio con la vida cotidiana.
-Diálogo social.
-Diversidad y no discriminación.
-Productividad del trabajo y desarrollo económico general.
El índice contempla seis dimensiones: condiciones de trabajo, cualificación y formación, combinación de trabajo y vida continua, salarios, perspectivas profesionales y estabilidad en el empleo

Principales conclusiones/recomendaciones del Índice

Entre sus diversas conclusiones, el ICE de Asempleo apunta que “según las características personales de los individuos, el perfil que disfruta de mayor calidad en su empleo es el de trabajador de mayor edad, que ocupa un puesto no manual, cualificado, y que tiene estudios terciarios (superiores)”. No hace distinción entre varones y mujeres, dado que ambos sexos obtienen puntuaciones muy parecidas en todas las dimensiones.
En cuanto a recomendaciones para la calidad del empleo en España, se sugieren actuaciones en: seguridad y estabilidad del empleo, calidad del entorno de trabajo y de los puestos.
-Seguridad y estabilidad del empleo. Deberían articularse en torno al concepto de la “flexiseguridad” (la búsqueda de la competitividad no puede ir en detrimento de la seguridad laboral). La línea de trabajo principal sería “la articulación de medidas eficaces y decididas desde los poderes públicos para combatir el excesivo nivel de la rotación laboral injustificada, (persiguiendo de forma eficaz el fraude en el uso de la contratación temporal), con la colaboración de los agentes económicos y sociales para promover la estabilidad en el empleo (no necesariamente en el puesto)”, propone el ICE de Asempleo. Para dicho fin sugiere la implantación de “programas parecidos a los que se desarrollan en el ámbito de la siniestralidad laboral, como el sistema de reducción de las cotizaciones por contingencias profesionales a las empresas que hayan contribuido especialmente a la disminución y la prevención de la siniestralidad laboral, o como el programa de adhesión voluntaria “PreVea” al que se podían acoger las empresas de alta siniestralidad laboral”.
-Calidad del entorno de trabajo y de los puestos. El objetivo es lograr una vida laboral satisfactoria “mejorando –cita Asempleo- el contenido humano del trabajo”. Para tal fin se debería incrementar la  autonomía y las oportunidades para el aprendizaje, la capacidad de decisión y la participación, así como las buenas prácticas de la dirección de las empresas y las buenas relaciones sociales en el lugar de trabajo. La calidad del puesto también requiere la limitación de la carga y la presión para realizar el trabajo así como el control de la exposición a factores de riesgo físico para la salud y de intimidación o abuso en el lugar de trabajo. Son áreas de mejora la distribución del tiempo de trabajo con vistas a mejorar la conciliación entre vida personal y profesional (evitar horarios ‘anti-sociales’), la potenciación del trabajo a tiempo parcial voluntario, o la implantación de la jornada laboral continua. Con respecto a la seguridad laboral, deben aplicarse las medidas oportunas para reducir el impacto en la salud de aspectos específicos del entorno físico.
Fuente: http://www.proteccion-laboral.com

lunes, 27 de marzo de 2017

Cómo detectar una oferta fraudulenta de trabajo

Estoy seguro de que alguna vez te has topado con una oferta fraudulenta de trabajo. Las puedes encontrar en diferentes formas y a través de diferentes medios y créeme que te conviene reconocerlas para evitarte algún disgusto.
En internet se pueden encontrar muchas ofertas de empleo falsas, más si hablamos en el área comercial dónde las empresas con un sistema piramidal están a la orden del día.
¿Quieres conocer las formas más comunes en las que puedes encontrar este tipo de ofertas? Pues sigue leyendo porque te lo explico a continuación.

Algunos tipos de ofertas fraudulentas.

  • Empresas de estructura piramidal.

Como te adelantaba anteriormente, este tipo de empresas aparecen sobre todo a través del área comercial y de ventas. En las empresas piramidales, se suelen prometer como gancho grandes cantidades de dinero sin pedir prácticamente ningún requisito en el proceso de selección. Más bien diría incluso que en la mayoría de los casos ni siquiera existe proceso de selección.
En principio parece de sentido común que el dinero fácil no existe, pero en ocasiones la necesidad y desesperación lleva a algunas personas a aceptar este tipo de “trabajos”.
En estas empresas a veces ocurre que establecen a los trabajadores unos objetivos imposibles de alcanzar mientras están de prueba. En este tiempo aprovechan para que los nuevos trabajadores vendan a sus seres queridos y allegados y a final de mes, aunque no han llegado a cumplir los objetivos (porque es imposible) les dejan otro mes para que lo vuelvan a intentar.
Finalmente los candidatos se acaban agotando y quemando. Este tipo de empresas son culpables en gran parte de la mala prensa que tienen a veces los comerciales y profesionales de ventas.
  • Ofertas en las que hay discriminación por razón de género, edad, nacionalidad o similares.

Si encuentras una oferta en la que haya algún tipo de discriminación por razón de género, edad, nacionalidad, etc, estás ante una oferta fraudulenta. Este tipo de anuncios son ilegales ya que van en contra de la igualdad. Además, tras este tipo de anuncio se suelen encontrar empresas de dudosa reputación.
  • Ofertas que te piden dinero antes de entrar a trabajar.

Este tipo de ofertas también son ilegales porque no se puede pedir dinero por adelantado para empezar a trabajar. Las empresas, para justificar ese gasto suelen decir que es para cubrir gastos como abonar la formación que vas a recibir, comprar materiales que vas a necesitar en tu trabajo, etc.
  • Te contactan por email con un mensaje estándar sin haber enviado tu currículum.

Puede que alguna vez hayas recibido un mensaje de este tipo. Me refiero a ofertas en las que te contactan por email ofreciéndote trabajo y además te dan un número al cual tienes que llamar para concertar una entrevista.
Además, muchas veces este mensaje te llega desde un correo de hotmail, gmail o similares.
Mucho cuidado porque la llamada te puede salir por un ojo de la cara. Además, este mensaje en ocasiones se ve claramente que tiene una redacción extraña con toda la pinta de haberlo traducido con un traductor desde otro idioma.
  • Ofertas en las que tienes un período de prueba no remunerado.

Esta práctica obviamente es ilegal porque los trabajadores tienen que cobrar desde el primer momento que empiezan a prestar sus servicios, aunque sea en el período de prueba.
Como verás, muchas de estas prácticas parece muy sencillo detectarlas porque el sentido común te dice que hay algo que no huele bien. Aún así, conviene recordarlas porque en muchas ocasiones estas oportunidades están bien camufladas y no es tan sencillo reconocerlas.
A modo de cierre, siempre hay que tener presente que el dinero fácil no existe y que nadie da mucho a cambio de nada. Si encuentras una oferta en la que prometen mucho, no tienes que hacer entrevista y todo es demasiado fácil, ponte alerta e investiga la procedencia de la empresa y de la oferta.
Para ello, tienes que ser proactivo y buscar en google el email que te ha contactado, buscar el teléfono al que te dicen que llames o buscar el nombre de la persona que te envía el email. Si es una oferta fraudulenta, seguro que no eres la primera persona con la que han contactado.
Hasta aquí ha llegado el artículo de hoy. Ahora me encantaría conocer tu opinión acerca de este tema. Estoy seguro de alguna vez te has topado con alguna de estas ofertas de trabajo.
Fuente: http://recotalent.com/detectar-oferta-fraudulenta/

viernes, 24 de marzo de 2017

Ya es primavera en tu entorno laboral: especial alergias

Sí, esta época del año es querida a la par que aborrecida según a quién preguntes. La primavera la sangre altera. Y la nariz. Y el aparato respiratorio. Y los ojos. Y la piel. Diremos que, de hecho, nos altera casi todo, cuando somos alérgicos.
Quien haya padecido alergias primaverales fuertes en el trabajo sabrá que es un buen quebradero de cabeza. Pues la sensación es lo que llamaríamos “insoportable” y no nos deja operar con normalidad. Esto, en según qué cargos, puede ser un peligro para nosotros y para nuestros compañeros si, por ejemplo, nuestro trabajo consiste en conducir u operar máquinas pesadas.
Pero el remedio más extendido, los antihistamínicos, también pueden conllevar muchos efectos secundarios peligrosos. Éstos acostumbran a provocar somnolencia, que hace que no sea recomendado su uso en trabajos como los que hemos mencionado. Aun así, antihistamínicos más actuales han conseguido hacer desaparecer gran parte de la somnolencia, sin llegar a erradicarla del todo.


Alergias propias de los lugares de trabajo

Además de la alergia estacional (primavera), existen las alergias típicas de los entornos de trabajo. Empleados del sector construcción, peluqueros, pintores, panaderos, carpinteros, personal de limpieza y sanidad son algunos de los oficios que a más alérgenos se enfrentan diariamente. Éstos pueden ser ácaros, harinas, pelos de animales, aerosoles, agentes colorantes, etc.
Algunas de las alergias ocupacionales más comunes son:
Rinitis:
Se caracteriza por la inflamación de la mucosa y la obstrucción de los conductos nasales. Esto provoca estornudos, secreciones y goteo nasal. Muchas veces va acompañada de asma.
Asma ocupacional:
Incluye dificultad para respirar, tos y opresión en el pecho. Si no se sigue un tratamiento adecuado ni evitamos la fuente de la alergia, puede llegar a hacerse crónico. Se recomienda utilizar algún broncodilatador bajo prescripción médica.
Dermatitis de contacto:
Erupciones en la piel, eccemas, enrojecimiento, picor, inflamación, ampollas o úlceras provocadas por algún agente alérgeno. De hecho, se han identificado hasta más de 250 substancias que pueden causar esta afección. Los trabajadores más vulnerables son los que están en contacto con materiales como el cobalto, el níquel, el látex o el mercurio.

Cómo combatir las alergias dentro de la empresa

Antes que nada, hay que recordar que, en España, las empresas tienen las siguientes obligaciones:
  • Etiquetar todos los productos que puedan conllevar algún riesgo. Se debe indicar cuáles son los componentes tóxicos, cáusticos o explosivos, y añadir instrucciones sobre cómo manipularlos y conservarlos.
  • Proporcionar EPIs a los trabajadores: cascos, guantes, uniformes botas etc. dependiendo del tipo de trabajo y los materiales que se vayan a utilizar.
  • Investigar sobre las causas de la alergia Detectar si es por mala limpieza, escapes u otras malas prácticas. Asimismo, se deberán mejorar las condiciones si se detecta un fallo de la empresa.
En cuanto a los trabajadores, también deberían seguir las siguientes recomendaciones:
  • Lógicamente, a la que aparezcan síntomas de alergia, se deberá consultar con un médico. Especialmente con un alergólogo o un neumólogo para recibir diagnóstico y tratamiento.
  • Si se comprueba que el alérgeno causante del problema está en el entorno laboral (y con la protección no es suficiente) se deberá solicitar otro puesto dentro de la misma empresa, en el que no se esté en contacto con la sustancia.
  • Cumplir con las medidas de protección propuestas por la empresa. Uso de EPIs o hábitos de higiene.
  • Leer siempre las etiquetas de los productos que manipularemos.
  • Es conveniente llevar una pulsera o medalla que indique a qué sustancias se es alérgico. Sobre todo con el látex y antes de cualquier exploración médica.
  • Si todas las medidas preventivas no funcionan, deberá demostrarse que se trata de una enfermedad profesional, cambiar de sector y puesto de trabajo. Si no se nos permite, podremos tramitar una incapacidad con su correspondiente indemnización.
Fuente: http://www.proteccion-laboral.com

jueves, 23 de marzo de 2017

¿Qué es realmente un Servicio de Prevención Ajeno?

Un Servicio de Prevención Ajeno, es una empresa especializada en la Prevención de Riesgos Laborales que cuenta con un Acreditación Oficial para poder asesorar, gestionar y adaptar a organizaciones y empresas para que cumplan con todos los requisitos marcado por la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales.

El empresario, para hacer frente a su deber de prevención, tiene que contar con una serie de conocimientos técnicos que no siempre tiene. Lo mismo ocurre también con respecto a otras obligaciones, como por ejemplo las fiscales. No es exigible que todo empresario sea un experto en fiscalidad. Por ello, cuando lo considera necesario, recurre a un servicio especializado.
En materia de Prevención de Riesgos Laborales, el planteamiento es muy similar. Hay tareas preventivas relativamente sencillas, pero hay otras, sin embargo, que por su complejidad requieren una asistencia especializada.

Los Servicios de Prevención no son la única alternativa para el empresario. Según la Ley, éste puede, en determinadas circunstancias, asumir personalmente la actividad preventiva o designar para ello a trabajadores adecuadamente capacitados. Por lo tanto, tendrán la obligación de contar con un Servicio de Prevención Ajeno que garantice la seguridad y la salud de sus trabajadores:
  • Organizaciones en las que la designación de uno o varios trabajadores sea insuficiente y no cumplan con las circunstancias necesarias para poder constituir un servicio de prevención propio.
  • Organizaciones que no desean constituir un servicio de prevención propio.
  • Organizaciones en las que el empresario asume parcialmente las obligaciones preventivas.
Los requisitos para que el empresario pueda asumir personalmente la actividad preventiva son: tener menos de 6 trabajadores  y que las actividades que lleve a cabo no se consideren de especial peligrosidad,  siempre que tenga la capacitación necesaria y esté presente de forma habitual en el centro de trabajo. Bajo ningún concepto el empresario podrá realizar directamente la vigilancia de la salud, por lo que siempre deberá contratar un Servicio de Prevención al menos para esta actividad.
Las actuaciones que realizan los Servicios de Prevención son muy variadas, por lo que se requieren de un equipo multidisciplinar. Los SPA deben asumir directamente el desarrollo de las siguientes funciones, siempre y cuando se hubieran concertado en el contrato firmado entre empresa y SPA:
  • Promover la gestión integrada de la prevención en la empresa.
  • Diseño, implantación y aplicación de un plan de prevención de riesgos laborales que permita la integración de la prevención en la empresa.
  • La evaluación de los factores de riesgo que puedan afectar a la seguridad y salud  de los trabajadores.
  • La planificación de la actividad preventiva y la determinación de las prioridades en la adopción de las medidas preventivas y la vigilancia de su eficacia.
  • Vigilar el ambiente y las condiciones de trabajo. Algunas situaciones de riesgo requieren, además de las medidas de control, un seguimiento para detectar posibles insuficiencias, situaciones anómalas o simplemente para asegurarse de que todo va correctamente.
  • Mantener registros de datos ambientales y sanitarios que permitan analizar la evolución de los problemas en el tiempo y establecer nuevas relaciones entre riesgo y daño.
  • Adaptar los puestos de trabajo. Se trata de un precepto preventivo y una de las tareas de prevención más concretas que debe abordar el Servicio de Prevención.
  • La información y formación de los trabajadores. La información y la formación de los trabajadores/as son un elemento integrante del deber empresarial de protección de la salud.
  • La prestación de los primeros auxilios y planes de emergencia.
  • Estar presentes en la empresa en determinados casos: por la especial peligrosidad de ciertas actividades o procesos, por requerimiento de Inspección de Trabajo o por la concurrencia de operaciones diversas que puedan agravar o modificar los riesgos.
  • La vigilancia de la salud de los trabajadores en relación con los riesgos derivados del trabajo. Esta actividad corresponde a los profesionales sanitarios del Servicio de Prevención. Sin embargo, y salvando la confidencialidad, la información sobre indicadores sanitarios sirve al resto del equipo para identificar riesgos o para detectar insuficiencias preventivas.
Tenemos que insistir en el carácter asesor de los Servicios de Prevención. Su función es dar apoyo técnico a los empresarios y a los representantes de los trabajadores/as para la organización de la prevención en la empresa.

Los Servicios de Prevención Ajeno, deben de contar siempre con una Acreditación para poder ejercer como tal, esta acreditación la otorga el Ministerio de Empleo y Seguridad Social a través de las Autoridades Laborales competentes en las Comunidades Autónomas.

Desde PS Sociedad de Prevención adquirimos el compromiso con todos nuestros clientes de ofrecerles soluciones eficaces, orientadas a las especificaciones de cada empresa, adaptadas a las normativas legales de aplicación para la prevención de riesgos laborales y con un precio muy competitivo. No dude en ponerse en contacto con nosotros y le daremos toda la información acerca de nuestro Servicio de Prevención Ajeno!!

Fuente: http://www.psprevencion.com

martes, 21 de marzo de 2017

Contratos de una hora y otras lindezas de la temporalidad

En la última Encuesta de Población Activa realizada por el INE se especificaba que la tasa de temporalidad en España se situaba en el 25,04%. O, en otras palabras, uno de cada 4 trabajadores tiene un contrato temporal. Esto ya nos parece grave, pero lo es más que hasta el 90% de los nuevos contratos registrados durante 2017 sean temporales. Así es, 9 de cada 10.


La temporalidad en España ya ha sido anteriormente definida como una de las enfermedades más graves del mercado laboral. Junto con Polonia, España es de los países europeos donde más se registra esta práctica. A pesar de que se dijo que las últimas reformas laborales, al abaratar los despidos podrían haber supuesto un incentivo para realizar más contratos indefinidos, el número de nuevos contratos temporales casi no ha decrecido.
Aunque es cierto que durante los años posteriores a la crisis esta modalidad de contratación ha aumentado, la costumbre de firmar contratos temporales es algo ya muy arraigado en nuestro país. En enero de 1995, por ejemplo, el 94,62% de los contratos registrados fueron de duración limitada y el mínimo de esta tasa fue el 84,55%, en enero de 2007. La actual cifra, como vemos, se corresponde más con la del 95.
En referencia a esta tendencia, UGT denuncia que la recuperación económica se está asentando en la generalización de la precariedad laboral. CCOO atribuye la situación a que la creación de empleo sigue concentrada en los sectores menos productivos de la economía como el comercio, la hostelería y los servicios auxiliares. Por el contrario, hay un peso bajo y decreciente en las actividades industriales. Debido a las fluctuaciones más características de los primeros sectores, el sindicato apunta que influye directamente en la precarización masiva contractual y de sueldo.

Consecuencias surrealistas

Luego está lo limitada que llega a ser la duración de algunos contratos temporales. El 2006 (año pre crisis), por ejemplo, se registraron 1,7 millones de contratos de menos de una semana de duración hasta agosto y representaba el 14,7% del total de contratación. Durante el mismo periodo, pero en 2016, la cifra ascendía casi al doble: más de 3,3 millones. Además, el 40% de éstos es a tiempo parcial.  En agosto de 2016, el número de contrataciones de menos de 7 días triplicaba el de las indefinidas y 4,5 de cada 10 contratos nuevos duraban menos de un mes.
La población española ha tenido que ir adaptándose a empalmar un trabajo temporal con otro porque, en la mayoría de ocasiones, no hay más remedio. Así lo manifestaban los testimonios de este artículo en El País. David Pena, por ejemplo, con sólo 32 años acumulaba 130 altas y bajas en la Seguridad Social entre 2014 y 2015. En su vida laboral sumaba experiencias de hasta un mínimo de una hora, haciendo de transportista, comercial, carga y descarga de  furgonetas, entre otros.
Luis Peña, montador de 40 años, también tiene una peculiar vida laboral: encadenó unas 30 altas durante el período de 6 meses en la televisión pública.
María y Pilar, del sector de la enfermería, son otro caso llamativo. Entre ambas acumularon unos 35 contratos durante el 2014 y están acostumbradas a trabajar así desde hace años. Al formar parte de una bolsa de empleados del hospital Meixoeiro en Vigo, tienen que decir sí cada vez que las llamen o bajan 500 puestos en la lista.
Son casos inverosímiles. Pero existen, y son resultado de la temporalización llevada al extremo en España. De hecho, en la sanidad pública son muy usuales las contrataciones por día. Un claro reflejo de la tolerancia que tiene este país a esta tendencia precaria.
Fuente: http://www.proteccion-laboral.com

sábado, 18 de marzo de 2017

¿Por qué es importante la vigilancia de la salud de los trabajadores?

¿Qué es la vigilancia de la salud?

La vigilancia de la salud de los trabajadores constituye uno de los instrumentos imprescindibles de los programas de prevención de riesgos laborales.
Siendo una de las obligaciones del empresario, según el artículo 22 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales establece que
corresponde al empresario la vigilancia de la salud del personal al servicio de una empresa”.

Objetivos de la vigilancia de la salud de los trabajadores

Hay dos tipos de objetivos en la vigilancia de la salud:
  1. Los individuales: relacionados con el individuo.
  2. Los colectivos: relacionados con el grupo de trabajadores.
Aunque en la práctica se les ha de conceder la misma importancia, la repercusión de cada uno es muy distinta.
  1. Objetivos individuales:
  • La detección precoz de las alteraciones de la salud del trabajador.
  • La identificación de los trabajadores especialmente sensibles a riesgos.
  • Corrección a través de “educación sanitaria” de conductas, hábitos y costumbres perjudiciales para la salud.
  1. Objetivos colectivos:
  • Valorar el estado de salud global de los trabajadores de la empresa.
  • Alertar sobre posibles situaciones de riesgo en puntos determinados de la empresa, a través de la relación de variables mediante técnicas epidemiológicas.
  • Incorporar al plan de prevención las medidas surgidas del estudio de los hallazgos detectados en la vigilancia de la salud.
  • Evaluar la eficacia del plan de prevención mediante la evolución del estado de salud del colectivo.

Tipos de servicio de prevención

Para poder llevar a cabo estos objetivos, la vigilancia de la salud deberá realizarla personal sanitario cualificado.
Por tanto, la empresa puede elegir entre dos alternativas a la hora de llevarlos a cabo:
  • Servicio de Prevención Propio de la propia empresaconstituido, al menos, por una Unidad Básica de Salud (UBS) formada por un médico del trabajo y un ATS del trabajo.
  • Servicio de Prevención Ajeno contratado por la empresa y que estará también constituido por una Unidad Básica de Salud.

Evaluación de riesgos y eficacia de medidas preventivas

La vigilancia de la salud es un componente esencial de la prevención de riesgos laborales y como tal, una actividad que debe integrarse necesariamente en todas las fases de actuación de los Servicios de Prevención.
La prevención supone un conjunto de actuaciones orientadas a evitar los daños a la salud.
Su referente fundamental, tanto para identificar los problemas como para verificar la idoneidad de las soluciones, no es otro que el propio estado de salud de los trabajadores.

Fuente de información para las empresas

La vigilancia de la salud, al recoger de manera sistemática información sobre el estado de salud de los trabajadores, es una fuente de información imprescindible para evaluar los riesgos y la eficacia de las medidas preventivas.
La información proporcionada por la vigilancia de la salud permite, además, detectar precozmente pérdidas de salud individual, formular hipótesis de causa-efecto y facilitar la adaptación del puesto de trabajo a la persona.
No debe utilizarse como sustitutiva de las medidas necesarias para evitar o controlar la exposición a riesgos.
Fuente: http://www.imf-formacion.com/

viernes, 17 de marzo de 2017

Las desventajas de trabajar en equipo (alguna tiene)

El post de hoy va a ser diferente. Nos hemos levantado inspirados y, cómo sabemos que será muy fácil encontrar artículos en torno a las ventajas de trabajar en equipo, hemos decidido hacer uno sobre las desventajas.
¡Ojo!, que creemos que el trabajo en equipo y la capacidad de colaboración son básicos para el mundo laboral, así como que seguramente tengan más ventajas que inconvenientes. Pero hoy compartiremos la cara B del asunto. Más que nada, para recordar que las relaciones humanas nunca están exentas de conflictos. Pero, si los sabemos detectar, es mucho más sencillo abordarlos y solucionarlos.

Cuando hay que tomar decisiones puede que impere la opinión de pocas personas. Por ejemplo, si los integrantes con cargos de mayor liderazgo comparten un punto de vista, otras voces pueden quedar silenciadas. Ya sea por miedo a llevar la contraria o porque no se les tenga en cuenta. Para evitarlo, se pueden introducir métodos de votación de tipo asambleario. O, simplemente, animar a que todos los miembros del equipo puedan dar su opinión sin ningún tipo de coacción. El respeto a las personas más allá de su rango es también un pilar básico.
Dedicar demasiado tiempo a la reuniones y en discutir sobre acciones, en vez de implementarlas, también es peligroso. Si éstas no están bien planificadas nos pueden robar horas para dedicar al trabajo propiamente dicho. Planificar una reunión, escoger un moderador, hacer una lista de temas que se tocarán etc. lleva un tiempo, sí. Pero mucho menos que lo que se podría alargar una que esté mal planeada. En PL tenemos un post dedicado a su optimización.
La presión social y los egos muy fuertes o muy delicados pueden hacer aparición durante algunas dinámicas. Si nos vemos influidos por la opinión general y no tenemos sentido crítico puede que se dejen de contemplar riesgos importantes. Si tener razón o la necesidad de demostrar que nuestras ideas son mejores es más importante que el objetivo final del proyecto, nuestra subjetividad nos desviará mucho de los resultados globales. Otra vez, el respeto por las opiniones ajenas es crucial. Rebatir no es descalificar a una persona o una idea.
La responsabilidad sobre los procesos puede quedar diluida en el grupo si no se definen roles. Es más práctico asignar encargados de cada proyecto o “controllers” que estén al tanto de que todo lo decidido se vaya ejecutando. Para escoger el rol de cada integrante del equipo, no sólo hay que tener en cuenta las capacidades intelectuales, sino también las psico-sociales.
Cuantos más integrantes tiene un grupo, más difícil es saber quién tiene que saber qué en cada momento. Qué es ruido para ellos y de qué es necesario que estén informados. Deberíamos pararnos a pensar en cómo afectan al trabajo de cada persona los avances que vaya habiendo, antes de decidirlo.
Pues sí, trabajar en equipo es muy ventajoso pero no es pan comido. Conocer los problemas que irán surgiendo cuando haya mucha diversidad de opiniones o de estilos de trabajo nos ayudará. Con lo que sí, ¿por qué no “sacar a relucir” las desventajas de trabajar en equipo?
Fuente: http://www.proteccion-laboral.com

miércoles, 15 de marzo de 2017

El sector del juego también sufre accidentes y E. P.

Existe la impresión generalizada de que el trabajo en el sector del juego (bingos y casinos) difiere de otros en cuanto a los factores de riesgo o la incidencia de las enfermedades profesionales (E. P.) y accidentes laborales. Esa apreciación equivocada ha propiciado la frecuente falta de medidas de prevención de riesgos laborales así como una preocupante falta de actuación por parte de las administraciones públicas y, por supuesto, de las empresas, que han querido imaginar, de manera interesada, unas situaciones poco menos que idílicas, sin más problemática que la derivada de las enfermedades comunes.


Baja siniestralidad

Entre los rasgos específicos del sector juego está su baja tasa de siniestralidad (aunque no es siniestralidad cero), a lo que hay que añadir la estabilidad en el empleo (más del 70% por ciento de los trabajadores son fijos, según un informe de UGT Madrid).
La central sindical recuerda que, en el sector del juego, “existen varios riesgos importantes (humo de tabaco, toxicidad de las monedas y billetes, iluminación, estrés, etc.), cuyo tratamiento no está siendo el más adecuado para conseguir su minimización o eliminación definitiva. Y que tienen capacidad de provocar daños a la salud de los trabajadores/as y, por tanto, de producir bajas laborales que afectarían a la productividad del sector y a la calidad de vida de sus trabajadores”.
Se reconoce como una debilidad actual la falta total de formación e información sobre Prevención de Riesgos Laborales entre los trabajadores del sector. Asimismo, una de las principales amenazas es la falta de libertad (o pocas posibilidades) para organizar el trabajo, no pudiendo decidir ni su ritmo (con márgenes muy estrictos y ajustados) ni sus descansos. Se estima que la reducción de la jornada laboral produciría una disminución importante de las bajas laborales, debidas fundamentalmente a la fatiga física y la carga mental que padecen los trabajadores del sector. Otros riesgos generalizados son el ruido, iluminación, temperatura, ventilación y climatización, trastornos musculo-esqueléticos, fatiga mental, turnicidad (cambio de turnos de trabajo) y trabajo nocturno, estrés por sobrecarga / trabajo monótono y repetitivo, acoso laboral / sexual. Destacamos algunos.

Trabajo a turnos y nocturno

El ser humano es diurno: estamos ‘programados’ para trabajar de día y descansar de noche. Nuestro reloj biológico controla la fisiología y la bioquímica del organismo sobre un patrón cíclico de 24 horas (ciclo circadiano). El cambio de turno de trabajo y, especialmente, el trabajo en el turno de noche provocan una inversión del ciclo natural actividad-descanso, obligando a los trabajadores por turnos a ajustar sus funciones al periodo de actividad nocturna, algo contrario a nuestra propia naturaleza. Los efectos adversos del trabajo por turnos se incrementan con la edad, siendo el grupo crítico de edad (en promedio) el comprendido entre los 40 y los 50 años. El envejecimiento hace cada vez más difícil dormir durante el día.
  • Alteración del sueño
La mayoría de los problemas de salud de las personas que trabajan por turnos tienen relación con la calidad del sueño. Nuestra predisposición a la actividad diurna hace que, al finalizar un turno de noche, el cuerpo no se encuentre, por lo general, predispuesto para el sueño. Esta falta de adaptación degenera, con el tiempo, en fatiga crónica, que puede provocar graves problemas de salud. El deterioro suele manifestarse, en primer lugar, por la alteración de los hábitos alimentarios y, más a largo plazo, con alteraciones más graves, que pueden ser gastro-intestinales, neuro-psíquicas y cardio-vasculares. Además, el trabajo por turnos puede interferir en la vida familiar y las relaciones sociales.

Estrés y estresores en juego

Los trabajadores de bingos y casinos tienen todas las cartas para que les toque lidiar con el estrés. Éste aparecerá, dependiendo de factores individuales, cuando la persona perciba que las demandas del entorno superan a sus capacidades para afrontarlas, y valore la situación como una amenaza. Entre los factores de estrés del colectivo encontramos:
  • Estresores del ambiente físico
-Iluminación. Es común en casi todos los bingos y casinos la iluminación inadecuada, focos iluminando directamente a la cara y deslumbrando, con excesiva potencia, zonas de las mesas de juego en sombra, etc.
-Ruido. Las máquinas tragaperras producen un efecto negativo en la concentración de los crupieres y el aumento de errores en su trabajo.
-Temperatura. Es frecuente el uso inadecuado del aire acondicionado y la calefacción, los cambios bruscos de temperatura y la salida de chorros de aire enfocados directamente a las zonas donde están situados los crupieres, los jefes de mesa y los cajeros, errores de diseño comunes.
  • Estresores de la tarea
-Sobrecarga laboral. Tiene un impacto directo en hábitos nocivos (alcohol, tabaco), incremento de la ansiedad, baja autoestima, fatiga, frecuencia cardiaca elevada y falta de satisfacción laboral.
  • Estresores de la organización
-Conflicto/ambigüedad de rol. Falta de definición en las áreas de trabajo, objetivos y responsabilidades.
-Relaciones interpersonales. Convivencia estrecha con otros trabajadores, jefes, subalternos, etc.; reparto de propinas diferente por categorías.
-Promoción y desarrollo. Es un gran estresor si se ven truncadas las expectativas personales.
Ganarle la partida a estos estresores pasa por dejar de considerar al juego como un sector seguro.
Fuente: http://www.proteccion-laboral.com