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lunes, 24 de octubre de 2016

La gestión de la SST en el contexto de una mano de obra de edad avanzada


Los trabajadores de edad avanzada son un porcentaje creciente de la mano de obra. Dado que las personas trabajan durante más tiempo, la gestión de la SST para una mano de obra de edad avanzada se ha convertido en una prioridad.
El objetivo de empleo de la estrategia Europa 2020  — aumentar la tasa de empleo de la población de entre 20 y 64 años al 75 % — implica que las personas en Europa tendrán que trabajar durante más tiempo.


Muchos atributos, como la sabiduría, el pensamiento estratégico, la percepción holística y la capacidad para deliberar, aumentan o aparecen por primera vez al avanzar la edad. La experiencia laboral y los conocimientos técnicos también se acumulan con la edad.
Sin embargo, algunas capacidades funcionales, sobre todo de carácter físico y sensorial, disminuyen como consecuencia del proceso natural de envejecimiento. La evaluación de riesgos (véase a continuación) debe tener en cuenta los cambios que puedan sufrir las capacidades funcionales y es necesario modificar el trabajo y el entorno de trabajo para hacer frente a esos cambios.
Los cambios de la capacidad funcional relacionados con la edad no son uniformes, debido a las diferencias personales en cuanto a estilo de vida, nutrición, condición física, predisposición genética a la enfermedad, nivel educativo, trabajo y otros entornos.
Los trabajadores de edad avanzada no son un grupo homogéneo sino que pueden existir diferencias considerables entre las personas de la misma edad.


La edad es solo uno de los aspectos de una mano de obra variada. Las evaluaciones de riesgos que tienen en cuenta la edad implican tener en cuenta las características relacionadas con la edad de distintos grupos de edad a la hora de evaluar los riesgos, incluidos los posibles cambios en las capacidades funcionales y el estado de salud.
Entre los riesgos relevantes para los trabajadores de edad avanzada se incluyen en particular:
  • una carga de trabajo física pesada
  • los peligros del trabajo por turnos
  • los entornos de trabajo con temperaturas elevadas o entornos fríos o con ruido
Como las diferencias entre las personas aumentan con la edad, no deben hacerse suposiciones basadas únicamente en este criterio. La evaluación de riesgos debe considerar las exigencias del trabajo en relación con las capacidades funcionales y el estado de salud de las personas.
Podrá encontrar más información en la actual herramienta disponible Evaluación interactiva de riesgos en línea (OiRA) así como en evaluaciones de riesgos que tienen en cuenta la edad y en garantizar la cobertura para todos.


La capacidad de trabajo  es el equilibrio entre el trabajo y los recursos personales; cuando el trabajo y los recursos personales se adaptan adecuadamente, existe una buena capacidad de trabajo. Los factores básicos que afectan a la capacidad de trabajo personal son:
  • la salud y las capacidades funcionales;
  • la educación y la competencia;
  • los valores, las actitudes y la motivación;
  • el entorno de trabajo y la comunidad laboral
  • el contenido, las exigencias del trabajo y la organización del trabajo
La capacidad de trabajo puede medirse con el Índice de capacidad de trabajo . El concepto de capacidad de trabajo indica que las acciones en el lugar de trabajo encaminadas a la promoción de dicha capacidad deben incluir todos esos factores.
La salud de las personas en la vida adulta se ve afectada por su comportamiento anterior en materia de salud. La disminución de las capacidades funcionales puede retrasarse y minimizarse con hábitos de estilo saludables, como hacer ejercicio con regularidad y comer de forma sana. El lugar de trabajo desempeña un papel clave para promover un estilo de vida saludable y para fomentar actividades que evitan el deterioro físico, y de este modo contribuye a mantener la capacidad de trabajo. La promoción de la salud en el lugar de trabajo incluye diversos temas, como la dieta y la nutrición, el consumo de alcohol, dejar de fumar, hacer suficiente ejercicio, la recuperación y el sueño.



La encuesta de opinión llevada a cabo por la Agencia en 2012 mostró que una gran mayoría de ciudadanos de la UE creen que unas buenas prácticas en materia de seguridad y salud son muy importantes para ayudar a las personas a que trabajen durante más tiempo.
Un diseño correcto del lugar de trabajo beneficia a todos los grupos de edad, incluidos a los trabajadores de edad avanzada. Como las capacidades cambian, también debe cambiarse el trabajo para compensar, por ejemplo:
  • La redefinición del trabajo o la rotación de puestos de trabajo
  • Las pausas breves más frecuentes
  • La mejora de la organización del trabajo por turnos, por ejemplo mediante turnos de rotación rápida (2-3 días)
  • Una buena iluminación y control del ruido
  • Un buen diseño ergonómico de los equipos

Las bajas por enfermedad de larga duración pueden provocar problemas de salud mental, exclusión social y el abandono prematuro del mercado de trabajo. Para apoyar a los trabajadores de edad avanzada es crucial facilitar el regreso al trabajo tras una enfermedad. Entre los ejemplos de iniciativas tomadas para promover la vuelta al trabajo en los países europeos se incluyen la creación de una «declaración de aptitud para el trabajo» (fit note ) en lugar de una «baja por enfermedad» (sick note) en el Reino Unido y el proyecto Intervenciones para la vuelta al trabajo  en Dinamarca.
Lea el informe de la EU-OSHA Vuelta al trabajo y obtenga más información en la hoja informativa relacionada.

Fuente: https://osha.europa.eu/es/themes/osh-management-context-ageing-workforce

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